Ayer inició el II Congreso Colombiano de Áreas Protegidas con una estructura de tres bloques temáticos y once simposios, cuyos objetivos son:

  • Visibilizar y posicionar las áreas protegidas, los subsistemas y las estrategias complementarias de conservación de cara a los nuevos retos del desarrollo económico y social del país como territorios para la vida y la paz.
  • Analizar las dinámicas sociales y ambientales en los paisajes urbanos y rurales como retos para la administración de las áreas protegidas y la articulación de estrategias complementarias.
  • Generar espacios para intercambio cultural, conocimiento y valoración social de las áreas protegidas en Colombia.


La apertura del evento estuvo a cargo de Julia Miranda, Directora de Parques Nacionales, seguida de una excelente conferencia dictada por Dan Laffoley, conservacionista de los océanos, comunicador y biólogo marino, sobre el estado actual del medio ambiente marino, la cual resumo en lo siguiente:

  • El océano se ha vuelto más ácido.
  • Se requiere proteger el 10% de los océanos.
  • Estamos caminando sonámbulos hacia una pesadilla.


DÍA 1 – CONGRESO COLOMBIANO DE ÁREAS PROTEGIDAS

El centro de convenciones estaba bastante nutrido de asistentes, todos reunidos para la conferencia que dictaría Juan Carlos Henao rector del Externado, en la que mostró las bases constitucionales para el sistema de áreas protegidas, de la que destaco que las normas se deben saber aplicar y no limitarse estrictamente a ellas; como bien decía Juan Carlos, se trata de un tema de ponderaciones, en el que se debe distinguir entre amenaza (daño inminente) y riesgo (daño aleatorio), diferencia que debemos aplicar para la actual política restrictiva que opera para el PNN Farallones de Cali.

Luego de esta conferencia empezarían los simposios, los cuales se desarrollarían de manera simultánea. Me interesaba más el simposio 5, el cual trataba sobre las visiones de instituciones frente al uso y ocupación de las áreas protegidas, en las que destacaron las intervenciones de UPRA (Unidad de Planificación Rural Agropecuaria) tocando el problema de acceso inequitativo a la tierra y su uso ineficiente, la del alcalde de Puerto Leguizamo quien se enfrenta a tener 41% de su territorio como parque nacional (PNN La Paya), la de Lida Riascos, líder de San Cipriano y su reseña histórica sobre la actual fundación que opera en esta parte del país y la de la asociación Yarumo Blanco, quienes van contra la economía de mercado, favoreciendo la economía colectiva y solidaria.

Síntesis Simposio 5

  • Es distinto cuando se vive en un área protegida.
  • Parque Nacional Natural es una definición abstracta hasta que no se recorra.
  • El campesino ve la norma como una amenaza, cuando ésta ha sido concebida para el bien común.
  • No se debe enfrentar la situación desde las posiciones.
  • Se nota un mayor interés por el tema de conservación, debido al aumento en la participación de comunidades y entidades.
  • Se debe fortalecer la organización para no seguir en la precariedad y crisis permanente de las instituciones, lo cual generaría un cambio en el estado y un aumento en la cantidad de recursos.


En la tarde entré al Simposio 6 para escuchar sobre los subsistemas de áreas protegidas, su planeación y sostenibilidad financiera, del cual me llamó la atención la intervención de Ernesto Enkerlin, quien mencionó que la conservación cuesta y que no se trata de un tema simplemente romántico, y la intervención de Camilo Díaz sobre la sostenibilidad financiera del sistema nacional de parques nacionales, con su tridente de concientización, cálculo y análisis de brechas financieras y la consecución de recursos.

DÍA 2 – CONGRESO COLOMBIANO DE ÁREAS PROTEGIDAS

El segundo día del congreso empezó muy bien con el foro áreas protegidas para el desarrollo organizado por la Revista Semana. En una misma mesa estuvieron varios de los personajes que toman las decisiones en el país, en temas de minería, ganadería, hidrocarburos y protección del medio ambiente, algo que no se concebía hace algunos años y que hoy es un gran avance. Algunos puntos relevantes fueron:

  • Contamos con 17 millones de hectáreas de áreas protegidas.
  • El ecoturismo como fuente de empleo pensando siempre en beneficiar a las comunidades. En 2012 creció 20% y en 2013 10% respecto al año anterior.
  • En este gobierno hemos pasado del 1.3% al 9% de área protegida costera, muy cerca del 10% de la meta Aichi.
  • Uno de los grandes retos es la coherencia de agendas interministeriales en cuanto al tema de conservación ambiental.
  • Se deben adelantar acciones conjuntas para el uso del suelo.
  • Convertir a los campesinos en sembradores de páramo.
  • Se debe saber atender la demanda. Por ejemplo, la demanda de pez león es de 20 toneladas al mes, pero no se genera, y de resolverse se solucionaría al mismo tiempo un problema de pez invasor.
  • Se debe garantizar la protección de los ecosistemas mientras se agiliza la interconexión (Viceministro de Infraestructura).
  • El ambiente no es un sector, Julio Carrizosa. Con estas palabras se ganó al público.
  • Se debe llegar a una equidad tributaria, ya que el presupuesto que asigna el estado a Parques Nacionales es miserable, Juan Lozano.
  • La solución a muchos de los problemas de sostenibilidad se resuelven con tecnología que actualmente no tenemos en el país.


Mención aparte merece la heroína, como varios de los actores del congreso se refieren, a Julia Miranda, actual Directora de Parques Nacionales Naturales, quien realizó una emotiva intervención, resaltando:

  • Un área protegida (AP) es la principal estrategia de protección, pero esto no puede quedarse solamente en un término, debe haber un plan de manejo en ella.
  • Colombia aporta el 10% de la biodiversidad mundial.
  • Las AP proporcionan el abastecimiento de agua del 31% de la población de manera directa, y del 50% de manera indirecta.
  • 4 de las 6 estrellas hídricas del país están en las AP definidas.
  • Las AP aportan 502 millones de dólares al sector eléctrico.
  • Las AP aportan 2.242 millones de dólares por reducción de sedimentación.
  • En Colombia no se hace polinización a mano gracias la protección de áreas.
  • Se debe hacer todo por la prosperidad y desarrollo de Colombia.
  • Las Áreas Protegidas prestan sus servicios SI ESTÁN BIEN CONSERVADAS.


En la tarde del segundo día se continuó con la misma dinámica de los simposios. Asistí al Simposio 1, las áreas protegidas en el contexto sectorial del país.

En la noche se lanzó el atlas del Sistema Nacional de Áreas Protegidas Continentales y se complementó con el conversatorio “lo que debes saber del sistema de información en áreas protegidas del SINAP”. La herramienta en línea está disponible en http://sinap.parquesnacionales.gov.co.

DÍA 3 – CONGRESO COLOMBIANO DE ÁREAS PROTEGIDAS

El tercer y último día de congreso fue el que más me gustó en términos de asimilar la información, pues a los conferencistas les dieron más tiempo para sus intervenciones, de las cuales resalto:

Brigitte Baptiste – Directora del Instituto Humboldt

Para pensar en un SINAP (Sistema Nacional de Áreas Protegidas) más complejo primero hay que trabajar en:

  • Una conexión entre las áreas protegidas y el resto del país.
  • Propiciar la integración de múltiples sistemas de conocimiento (multiculturalidad), estamos muy atrasados en esto.
  • Entender el carácter dinámico de las transformaciones socioecológicas.


Las cuáles son las bases que permitirán mejor gobernanza, mayor respeto cultural y mayor adaptabilidad.

Javier Castroviejo – Desafío de la conservación en los llanos

Inició su charla con la siguiente frase, “Sin naturaleza no hay cultura, y sin cultura no hay nación”, y continuó mostrando una serie de fotos muy impactantes sobre acciones que se están llevando a cabo en el llano, que lo está perjudicando muchísimo, entre ellas:

  • El 88% del territorio ha sido concedido para explotación de hidrocarburos.
  • Los cultivos de arroz agotan la tierra. En este momento hay 190.000 ha destinadas a esto, y se proyecta que crezca a 3.000.000 de hectáreas.
  • Siembra de palma proyecta a 1.200.000 ha.
  • La ganadería ocupa 12.5 millones de hectáreas.


Conocer estas cifras y ver las imágenes es doloroso, debemos trabajar para que esto no pase, o por lo menos para que se reduzca. Vemos un amplio panorama de trabajo, la labor es titánica, pero debemos empezar.

por RENÉ ALEJANDRO HUERTAS CAICEDO
Director General Picoloro Ecoturismo