Antes de 1747 se veneraba a San Antonio de Padua, en una capilla de la iglesia de San Pedro, pero el párroco José de Alegría y Cayzedo dispuso que se hiciera una capilla aparte, para facilitar el acceso a los creyentes que vivían en San Fernando, La Chanca, El Peñón, y en la parte baja de una colina que aún no tenía nombre.
La construcción de la capilla inició en 1746 y finalizó en 1747, fue realizada en adobe con la técnica calicanto y de acuerdo con Alfredo Rubio, sobresalen en ella tres estilos arquitectónicos: barroco en el altar interno, mudéjar en el frente y colonial en el techo.
Esta obra religiosa fue llamada Capilla de San Antonio en honor al santo que se veneraba, a quien se le pide pareja con la popular frase “San Antonio dame novio”, como también por los objetos perdidos y por la protección a los hijos. Posteriormente la colina y el barrio, también serían llamados San Antonio.
La iglesia de San Antonio fue construida gracias a dos donaciones iniciales que hicieron un ecuatoriano y un español, a la cofradía de San Antonio de Padua. Por un lado el ecuatoriano Francisco Garcés de Aguilar donó el terreno, y por otro el español Juan de Orejuela entregó 1.000 patacones, nombre popular con el que era conocida la moneda en la época colonial (1 patacón equivalía a 8 reales).
Iglesia de San Antonio en 1937
Foto tomada por Michael Cataño
La Capilla de San Antonio en el siglo XX
En la década de 1920 a 1930 se pensó en reemplazar la Capilla de San Antonio, primero por un gran templo del Sagrado Corazón y luego por un seminario, pero ninguno de estos proyectos se desarrolló.
En 1944 el obispo Luis Adriano Díaz intentó vender la colina y la iglesia de San Antonio, encontrándose contra la oposición de la comunidad, que finalmente hizo que el municipio la comprara y restaurara.
En 1967 llegaron 13 monjas del convento de Santa Clara de Oslos (Antioquia), para establecerse en una casa adecuada para ellas, contigua a la Iglesia de San Antonio. Esta casa sería ampliada tres años después, habitando el lugar desde aquellos años, las Hermanas Clarisas, consagradas al servicio de Dios y de la comunidad.
En 1997 la Iglesia de San Antonio fue declarada Patrimonio Material de la Nación, quedando reconocida como un bien de interés cultural.
A SAN ANTONIO DE LA COLINA
por Don Casto, miembro del Corrillo del Gato Negro
San Antonio de Padua, tu colina
suaviza el pensamiento dulcemente,
y eres para tu Cali la más fina
joya que se contempla en Occidente.
Yo tengo allí mi estrella vespertina
cuando se oculta el sol en el poniente
y es la única ilusión que me fascina:
sobre tu loma reclinar mi frente.
Buscar los compañeros del corrillo
quemar las vacalocas y el castillo
y gozar las delicias de tu fiesta.
Contemplar la reliquia de tu capilla
tanto más bella cuanto más sencilla
y dormir en tu regazo eterna siesta.
REFERENCIAS
Alcaldía de Cali. Historia de la Capilla de San Antonio y el Corrillo El Gato Negro.
Alcaldía de Cali. Datos sobre monumentos en Cali. Disponible en cali.gov.co.
Canal dos. La historia de Capilla de San Antonio. Disponible en youtube.
Periódico El País. Las Guardianas de San Antonio. Disponible en El País.
